Detrás del K-pop (pt. 1): La Influencia Estadounidense en Corea
- Ethan Rodríguez
- 19 mar 2021
- 4 Min. de lectura
Como la palabra lo sugiere, el k-pop se refiere al pop hecho en Corea, una música influenciada por muchísimos géneros musicales, pero recientemente cuando hablamos de k-pop solemos referirnos a la cultura de los k-pop idols.

El k-pop idol suele ser un cantante-bailarín extremadamente atractivo demasiado perfecto para ser humano, que suelen ser fabricados y entrenados por una empresa encargada de la producción, mercadotecnia y distribución..
La industria de los idols coreanos es una manera de hacer música tan fríamente calculada e industrializada que parece sacada de una novela distópica, y aún más cuando sabemos que la existencia de este gigante fenómeno cultural se la debemos realmente a un solo señor: Lee Soo-man, el cerebro detrás de la exitosísima fórmula para crear k-pop idols.
Para entender al k-pop es necesario conocer la historia de Corea del Sur, que, como podrán imaginarse, no es una historia bastante tranquila ni fácil de explicar.

La Península Coreana era un territorio ocupado por Japón durante la Segunda Guerra Mundial, y que, en 1945, al liberarse de Japón, empieza a tener influencia de la cultura occidental con bares y clubes que ponían música occidental a lo largo del país.
Luego, durante la Guerra Fría, Corea se divide en dos: Norte y Sur, y los gobiernos de ambas partes decían ser los soberanos de todo el país. El Norte era comunista y apoyado por la Unión Soviética, y el Sur era un Estado capitalista creado por Estados Unidos para pelear en contra del comunismo.
Como producto de esto, los Estados Unidos nombraron a Syngman Rhee como el primer presidente de Corea del Sur, que se caracterizó por encarcelamientos extrajudiciales y ejecuciones, llevando a masacres de civiles.
Rhee renunció después de un levantamiento estudiantil, pero todo el revuelo político fue usado por Park Chung-hee para tomar el poder, convirtiéndose en otro dictador anticomunista. Durante su gobierno la ayuda económica de Estados Unidos aumentó debido a la participación de Corea en la guerra de Vietnam, cosa que le permitió seguir con la fuerte represión sobre la población.

Park Chung-hee fue asesinado, y seis días después llegó otro dictador llamado Chun Doo-hwan, quien tomó el poder por nueve años más, donde se enfrentó a las protestas nacionales imponiendo ley marcial, llevando a otra masacre.
No fue hasta 1988, después de muchas protestas, que Corea del Sur llevó a cabo sus primeras elecciones presidenciales y se convirtió en una democracia liberal.
Estados Unidos tuvo una gran parte en el origen e historia de Corea del Sur, así como una presencia continua por parte de los militares para combatir el comunismo. Gracias a esto, los coreanos estuvieron bastante familiarizados con la cultura norteamericana.

Pero al mismo tiempo, gracias a las constantes dictaduras ejerciendo un control estricto sobre su población, no hubo realmente una industria musical hasta 1988.
En 1992, un grupo de tres miembros llamados Seo Taiji and Boys interpretó una canción de rap en una competencia de talentos de la televisión coreana que horrorizó a los jueces quienes los clasificaron en último lugar, pero al mismo tiempo deleitó a la gente joven que los vio en casa.
Antes de Seo Taiji and Boys, los coreanos conocían la música estadounidense y, evidentemente, la música coreana; pero nunca habían visto la combinación de las dos hecha de esta manera. Los historiadores de la música coreana generalmente citan a esta presentación en vivo como el comienzo del k-pop.

Ahora que ya hablamos del contexto histórico, podemos empezar a hablar de Lee Soo-man.
Lee nació en Seúl en 1952 durante la Guerra de Corea. En ese momento el género pop coreano dominante era el trot, que prestaba elementos de la música occidental y de las canciones populares japonesas.
Sin embargo, Lee se sumergió en el folk estadounidense y en la música rock coreana que comenzó en las bases militares de Estados Unidos.
Lee se hizo conocido como cantante popular e incluso tuvo una banda de hard rock que duró bastante poco, llamada Lee Soo-man y los 365 días. También se convirtió en DJ y en anfitrión de música televisada y shows de variedades.

El gobierno coreano tomó medidas fuertes contra la escena musical arrestando y encarcelando a varios músicos prominentes por cargos de posesión de marihuana y más pretextos sin fundamento.
Cuando un golpe militar instaló a Chun Doo-hwan como presidente en 1980, la radio y los programas de televisión de Lee fueron cancelados. Eso hizo que Lee se mudara a Estados Unidos a estudiar una maestría en ingeniería informática, donde empezó a tener una gran fascinación por la programación de vídeos musicales que ponía un canal nuevo llamado MTV, en donde estaban en pleno auge las super elaboradas producciones audiovisuales de pop ultra refinado con coreografías impresionantes como las de artistas al estilo de Michael Jackson.

Así que, una vez terminó sus estudios, Lee regresó a Corea decidido por replicar el entretenimiento estadounidense. En 1989 funda la compañía SM Entertainment, y un año después debutó con Hyun Jin-young.
Y tú, ¿crees que Lee Soo-man logrará alcanzar el nivel de la industria del entretenimiento de los Estados Unidos? Descúbrelo en la segunda parte.
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